El ministro de Economía de Brasil, Paulo Guedes, amenazó el viernes con renunciar al cargo si el Congreso no aprueba las reformas estructurales que presentó, que incluyen un fuerte ajuste económico y que son avaladas por el presidente Jair Bolsonaro.
Salgo del cargo sólo si me matan a balazos. Mientras exista esta agenda de reformas a ser perseguida estaré aquí, si el presidente desiste de esta agenda, si el Congreso la bloquea, entonces debo irme a casa, dijo Guedes durante una videoconferencia con el fondo de inversiones XP Investimentos, el más grande de Brasil.
El ministro busca aprobar la próxima semana la reforma tributaria, que prevé unificar impuestos de los estados y crear un IVA, pero también reducir el impuesto a las ganancias que pagan las empresas.
A cambio, pretende crear un impuesto al comercio electrónico, que aumentó exponencialmente desde el inicio de la pandemia, que ya provocó resistencias en el Congreso, y que incluye también la desregulación para el sector energético y petrolero.
El ministro ya había logrado en 2019 una primera reforma, la previsional, con el apoyo del jefe de Diputados, Rodrigo Maia, un crítico del presidente pero que abraza la agenda ultra liberal del Gobierno.
El jueves a la noche, en la videoconferencia, Guedes ratificó que pese a los efectos de la pandemia el gobierno avanzará con la agenda de privatizaciones de empresas públicas.
Lo que quiero hacer es vender las compañías estatales, acelerar las privatizaciones, usar recursos del petróleo y poder reducir la deuda, afirmó Guedes.