El pleno del Senado brasileño aprobó el nombramiento de Augusto Aras, postulado por el presidente Jair Bolsonaro como nuevo procurador general de la República. Augusto Aras sucederá a Raquel Dodge, la primera mujer que ejerció ese cargo, impulsada por el entonces presidente Michel Temer, y cuyo mandato de dos años venció este mes.
El nombramiento de Aras fue respaldado primero por la Comisión de Constitución y Justicia del Senado, y luego por el pleno de la cámara alta, en este caso con 68 votos a favor y 10 en contra.
El nuevo fiscal general, defensor de un Ministerio Público independiente y sin partidos, se desempeñaba hasta ahora como segundo de Dodge.
Con la postulación de Aras, Bolsonaro salteó una antigua tradición según la cual los mandatarios eligen al procurador general de una lista de tres nombres propuesta por el Ministerio Público.
Bolsonaro recibió la lista pero en ella no figuraba Aras, quien se había manifestado públicamente contra el método usual de elección.
De 60 años, Aras es doctor en derecho con una maestría en economía, da clases en la Universidad de Brasilia y trabaja en el Ministerio Público desde 1987. Es considerado conservador en lo político y desarrollista en lo económico.