La explosión que se produjo la tarde del sábado en Caracas, Venezuela; mientras el Presidente Nicolás Maduro pronunciaba un discurso, ha sido fuertemente condenada por diversas autoridades a nivel mundial.
El hecho -que ocurrió en el marco de la celebración del aniversario número 81 de la Guardia Nacional Bolivariana- fue catalogado como un atentado por el Gobierno venezolano e, incluso, Maduro acusó directamente a su homólogo colombiano, Juan Manuel Santos, de estar detrás de esta situación.
Se trata de un atentado para matarme, han intentado asesinarme el día de hoy y no tengo duda que todo apunta a la derecha, a la ultraderecha venezolana en alianza con la ultraderecha colombiana y que el nombre de Juan Manuel Santos está detrás de este atentado, no tengo dudas, declaró el Jefe de Estado de Venezuela en un discurso que fue emitido en cadena de radio y televisión.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba publicó un mensaje en el que expresaban el apoyo de las autoridades de la isla a Maduro tras el incidente: El general del ejército Raúl Castro Ruz, primer secretario del PCC, y el Presidente Miguel Díaz-Canel, condenan enérgicamente el intento de atentado contra el Presidente Nicolás Maduro. Ambos líderes expresaron su plena solidaridad e irrestricto apoyo al Presidente Maduro, al Gobierno y a la Unión Cívico-Militar del pueblo bolivariano y chavista, según se añade en el texto difundido en Twitter por la cancillería.
El Jefe de Estado boliviano, Evo Morales, también se refirió a este hecho, calificándolo como un intento de magnicidio: Es un delito de lesa humanidad, sólo muestra la desesperación de un imperio derrotado por un pueblo valiente. Nuestra solidaridad. ¡Fuerza hermano Presidente Nicolás Maduro y pueblo bolivariano!. Después del fracaso en su intento por derrocarlo democrática, económica, política y militarmente, ahora el imperio y sus sirvientes atentan contra su vida, añadió Morales.
Por su parte, el Presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, también expresó su rechazo a estos hechos a través de una carta enviada a Maduro: Con el corazón lleno de indignación, con el fuego sagrado de nuestra hermandad revolucionaria, nuestra condena enérgica a esos cobardes terroristas, que continúan en su perverso afán de sembrar dolor y muerte en nuestras tierras benditas.
Ortega insistió en que los cobardes terroristas, criminales, desesperados y vencidos en todas partes, se ensañan, pero, ni pudieron, ni podrán ¡No pasarán!. Al hablar en plural, el Presidente nicaragüense hizo referencia al problema interno que atraviesa, desde abril pasado, por protestas contra su Gobierno, al que las organizaciones humanitarias nacionales e internacionales responsabilizan por la muerte de entre 317 y 448 personas.