Lenín Moreno, Guillermo Lasso, Cynthia Viteri y Paco Moncayo son los principales candidatos en las elecciones de este domingo en Ecuador, en las que se elige al sucesor de Rafael Correa y el legado de su Revolución Ciudadana. La mayoría de encuestas dan al candidato del Gobierno, Lenín Moreno, la delantera, pero su apoyo sería insuficiente para ganar en primera vuelta.
En el balotaje, pactado para el 2 de abril, Moreno se enfrentaría a su más cercano perseguidor, Guillermo Lasso, o a Cynthia Viteri, quien a pesar de figurar como tercera en las encuestas ha venido subiendo rápidamente en los últimos días.
El modelo de Ecuador es presidencialista, por lo que se elige al Jefe de Estado y al poder legislativo de forma separada. En tres papeletas diferentes, los ecuatorianos votarán al binomio presidencial (Presidente y Vicepresidente) y a sus asambleístas nacionales y provinciales. Además, las urnas decidirán quiénes serán las cinco personas que representarán a su país en el Parlamento Andino. A estas cuatro papeletas se suma otra para resolver por consulta popular si se prohíbe o no a los funcionarios públicos tener bienes o capitales en paraísos fiscales.
El deterioro de la economía, provocado en parte por el fin de la bonanza petrolera, el endeudamiento del Estado y la situación laboral copan gran parte del discurso de los candidatos. La oficialista Alianza PAIS diagnostica una crecimiento económico del 1,4% para 2017, mientras que la oposición repite las predicciones del Banco Mundial, que pronostican una caída del 2,9%.
El estallido de casos de corrupción en la empresa pública Petroecuador y los sobornos pagados por la constructora de Brasil Odebrecht son munición electoral. La corrupción es la tercera preocupación de los ecuatorianos.
A continuación, perfiles de los tres contendientes con más posibilidades de sustituir a Correa en el Palacio de Carondelet.
Lenín Moreno, ex-vicepresidente de Correa entre 2007 y 2013, de hablar pausado y sonrisa fácil, Lenín, de 64 años, es la carta del movimiento oficialista Alianza País para perpetuar el Socialismo del siglo XXI.
A diferencia de la imagen fuerte que proyecta Correa, su estilo afable y conciliador según el propio mandatario, lo perfila, como alguien capaz de abrir un diálogo con sectores enfrentados con el correísmo en la última década, opinan analistas.
Moreno, parapléjico por un disparo en un asalto en 1998, se traslada en silla de ruedas y podría convertirse en el primer ecuatoriano con discapacidad en asumir la Presidencia.
Licenciado en administración pública con estudios de medicina y psicología, es el abanderado de las causas sociales tras liderar la Misión Manuela Espejo, primer diagnóstico de la situación de los discapacitados en Ecuador.
El poder es un ejercicio de humildad, de servicio, no de vanidad, declaró hace poco el candidato, que escribe libros de humor y en sus discursos no faltan los chistes.
Casado y con tres hijas, oriundo de la provincia amazónica de Orellana (este), fue nominado al premio Nobel de Paz en 2012 y designado en 2013 secretario general adjunto de la ONU para la discapacidad.
Guillermo Lasso, ex banquero de 61 años, exministro de Economía en el gobierno del derrocado Jamil Mahual y exgobernador de la provincia de Guayas, representante de la derecha conservadora, aspira por segunda ocasión a la presidencia de Ecuador, tras perder en 2013 en primera vuelta.
Nació en Guayaquil (suroeste) en una familia de clase media. Casado y con cinco hijos, se define como un emprendedor. Trabajó desde los 15 años, llegó a ser presidente del Banco de Guayaquil aunque abandonó sus estudios universitarios de Economía, y se dedicó de lleno a la política desde 2012.
Vamos por el cambio es su lema y su mayor oferta es la creación de un millón de empleos en cuatro años.
Eliminar 14 impuestos y atraer inversión extranjera son otras propuestas del candidato del movimiento Creo. Correa le achaca su participación en la crisis bancaria de 1999 que derivó en la dolarización del país en 2000, el congelamiento de depósitos y la migración de cientos de miles de ecuatorianos.
La exdiputada Cynthia Viteri es la única mujer en liza para la elección presidencial del próximo domingo, pero no es la primera vez que aspira a la Presidencia. La abogada guayaquileña de 51 años, con una maestría en marketing político, se presentó en 2006.
Fue representante del Partido Social Cristiano en la Asamblea Constituyente de 1997-1998 y desde entonces se ha desempeñado como diputada -hasta que presentó su candidatura- siguiendo una línea de derecha, aunque de sesgo progresista.
Casada y con cinco hijos, Viteri se identifica en campaña con las madres y ofrece aumentar el empleo, bajar los impuestos, subir los salarios y atender los casos de corrupción.
El general en retiro Paco Moncayo es recordado por liderar en 1995 la victoria militar en el Cenepa durante la guerra con Perú, y por su gestión como alcalde de Quito entre 2000 y 2009.
De 76 años, con estudios en Ciencias Internacionales, el exjefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas también es miembro de la Academia Nacional de Historia. Además, fue diputado por la Izquierda Democrática tras su retiro de la vida militar.
Menos confrontador que Lasso y Viteri, el candidato quiteño, casado y con cuatro hijos, considera el desempleo como el problema más urgente y propone reducir gastos, reorganizar el Ejecutivo, atraer inversión extranjera y auditar la deuda pública.