El gobierno de China reiteró en respuesta a Donald Trump que la política de una sola China, que rige sus relaciones con otros países, es “innegociable”. La afirmación sigue a las declaraciones del presidente electo de EEUU quien volviera a amenazar con no respetarla si Beijing no acepta negociar los lazos comerciales bilaterales.
“Urgimos a Estados Unidos a que se dé cuenta de la alta sensibilidad que tiene la cuestión taiwanesa y respete los compromisos tomados por los anteriores gobiernos norteamericanos”, señaló en un comunicado reproducido por la agencia Xinhua el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino Lu Kang.
El Gobierno de China es el único con legitimidad para representar a esa nación, “un hecho reconocido internacionalmente que nadie puede cambiar”, insistió la fuente oficial.
Trump dio a entender el viernes en una entrevista al diario Wall Street Journal que no respetaría el principio de una sola China, que implica no reconocer a Taiwán como un Estado, a menos que Pekín cambiara prácticas comerciales y políticas monetarias que él considera perjudiciales para Estados Unidos.
“Todo está bajo negociación, incluido el principio de una sola China”, subrayó Trump, una afirmación que ya lanzó en diciembre durante una entrevista a la cadena de televisión Fox News, y que también despertó entonces críticas y preocupación en Pekín.
China obliga a todos los países con los que mantiene lazos diplomáticos a que respeten ese principio, según el cual el Gobierno de Taiwán -nacido del exilio a esa isla del bando perdedor en la Guerra Civil entre comunistas y nacionalistas- no es legítimo y no se pueden tener lazos diplomáticos oficiales con él.
Trump, que en noviembre aceptó una llamada telefónica de la presidenta taiwanesa Tsai Ying-wen, un gesto que igualmente fue condenado por el régimen comunista chino, ha mostrado desde su victoria electoral que desarrollará una política dura frente a China tanto en lo político como en lo comercial, lo que hace temer fuertes encontronazos entre las dos superpotencias.
Los medios oficiales chinos advirtieron esta semana que EEUU se encaminaba a una “confrontación devastadora”, y hasta lanzaban la hipótesis de un conflicto bélico, incluso nuclear, entre las dos principales economía mundiales, si las amenazas y advertencias de Trump y su equipo se materializaban.