A pesar de la paupérrima zafra de calamar Illex de este año en aguas de las Islas Falkland, el interés por las licencias para la próxima temporada permanece firme y se anticipa que habrá una sobre suscripción, confirmó en estos días la legisladora MLA Phyl Rendell.
La legisladora recordó que en ocasiones anteriores, las zafras malas y de bajas capturas, eran seguidas por un interés por licencias de captura bastante reducido, empero afortunadamente esto no parece ser el caso para el 2017.
Con toda seguridad las anteriores abundantes capturas fueron un factor tenido en cuenta, como también la política del gobierno de las Islas de devolución y acreditación de licencias en zafras malas admitió MLA Rendell.
La legisladora agregó que el cumplimiento de los requisitos en materia de condiciones de seguridad y navegabilidad de los poteros, prácticas de operación a bordo, atención y bienestar de las tripulaciones, ha sido nuevamente recordado, y con énfasis, a todos los involucrados en la pesca. Todo esto recibirá un nuevo impulso cuando el otorgamiento de las licencias de captura.
En cuanto a las zafras de calamari (loligo) 2016 se mantuvieron abiertas durante toda el período programado, lo cual significa un retorno a condiciones normales luego de lo acontecido en el 2015, cuando los caladeros de Loligo fueron invadidos por voraces Illex.
Este año la primera zafra de Loligo se caracterizó por un ingreso tardío de la biomasa, y por tanto los tamaños promedio del calamar resultaron pequeños. La segunda zafra fue de capturas modestas hasta el primero de octubre cuando se registró un ingreso fuerte y demorado del calamari. La captura agregada para la zafra 2016 fue finalmente de 45.705 toneladas, alcanzando un promedio de media tabla, el séptimo en quince zafras.
Pero adicionalmente el 2016 marcó una continuación de las capturas relativamente altas de merluza y el pobre desempeño del caladero de otras especies. MLA Rendell finalmente explicó que el cambio de volúmenes de las especies en los caladeros de peces de aleta se presentan como desafíos tanto para los administradores de los caladeros como para los patrones de pesca. (Penguin News)