La canciller de Argentina Susana Malcorra afirmó que “seguirá llevando adelante la responsabilidad” de ser la ministra de Relaciones Exteriores del país que le “ofreció el presidente Mauricio Macri”, luego de quedar afuera de la carrera por la secretaría general de la ONU, que finalmente recayó en el portugués Antonio Guterres.
Malcorra afirmó que continuará al frente de la cancillería argentina, y destacó que se barajaban las ideas que para la elección serían prioridad los candidatos de Europa del Este o estaría presente la prioridad del género, porque se pensaba que una mujer podía llegar a liderar la ONU.
Sin embargo, el Consejo de Seguridad de la ONU decidió que el mejor era Guterres, por lo que evidentemente ninguna de estas dos prioridades fueron parte de la decisión, sostuvo, y agregó que el nuevo favorito para encabezar la ONU es muy capaz y va a hacer muy bien ese trabajo.
Sobre su experiencia al disputar la secretaria general de la ONU, Malcorra declaró: Yo fui la única candidata que tuve un veto preliminar. Yo tuve una sola carta roja. No sé quien puso la carta roja, hay especulaciones pero no sé quien lo hizo, manifestó.
Además, se refirió a la cuestión del Atlántico Sur y las Islas Malvinas y afirmó: Estamos comprometidos para encontrar las mejoras salidas posible y que se avance respecto a lograr un diálogo con Gran Bretaña respecto al tema.
Insistió en que un comunicado conjunto dista de ser un acuerdo entre partes y señaló que con Gran Bretaña queremos tratar de destrabar múltiples temas que nos han estado separando desde el conflicto bélico de 1982.
Quizás podamos construir un puente de confianza y así podríamos conseguir el tema de fondo que es la cuestión de la soberanía. Primero vamos a trabajar con la identificación de los caídos en la Guerra de Malvinas. Luego sobre la exploración y explotación de los recursos naturales de las Islas y alrededores, detalló.
En ese sentido, Malcorra manifestó que Argentina ha demostrado la intención de avanzar y dialogar sobre este tema aunque reconoció que la resolución de fondo -la soberanía- no será inmediata, pero esta es la forma en que se resuelven las cosas.
Para nosotros, la soberanía no es una cuestión que involucre a los habitantes sino un aspecto territorial. Pero es claro que hay que reconocer la forma de vida de esos habitantes, en referencia al referéndum de autodeterminación de los habitantes de las Falklands de marzo del 2013.