El presidente de Brasil, Michel Temer, expresó este martes ante la ONU el “compromiso inquebrantable con la democracia” en su país tras el reciente juicio político que culminó con la destitución de la presidenta Dilma Rousseff.
Temer se estrenó en el debate de alto nivel de la Asamblea General de la ONU, en la primera intervención de un jefe de Estado, cumpliendo con una tradición que se mantiene desde 1955 para que sea ese país el que inicie las exposiciones en ese órgano de la ONU.
“Brasil acaba de vivir un proceso largo y complejo, dirigido por el Congreso nacional y la Corte Suprema”, afirmó Temer al referirse al “proceso de destitución” que terminó el 31 de agosto pasado, cuando se despojó de su mandato Rousseff. “He de recalcar que todo tuvo lugar en el absoluto respeto del orden constitucional”, recalcó el gobernante brasileño.
“Este ejemplo que hemos dado al mundo -insistió- demuestra claramente que no puede haber democracia sin estado de derecho. Es decir, que las normas se aplican a todos, incluso a los más poderosos”. El proceso que condujo a la destitución de Rousseff, agregó Temer, se está haciendo en medio de una “depuración del sistema político. Contamos con una judicatura independiente, una fiscalía activa y también órganos ejecutivos y legislativos que cumplen sus labores”, insistió Temer.
“Por lo tanto -agregó-, la voluntad de los individuos no es lo que prevalece, sino la fortaleza de las instituciones bajo la vigilancia de una sociedad plural y de una prensa libre”. El gobernante brasileño agregó que la tarea del Gobierno ahora es la de reanudar el crecimiento económico para garantizar que los trabajadores “recuperen los millones de empleos perdidos”, en medio de una “responsabilidad fiscal y social”.
En su mensaje, y al referirse a temas internacionales, Temer insistió en la necesidad de aplicar reformas al Consejo de Seguridad, dominado ahora por cinco potencias mundiales (Estados Unidos, Rusia, China, Francia y el Reino Unido). “Seguiremos trabajando por superar el punto muerto que hay sobre esta cuestión”, agregó Temer al referirse a gestiones que, entre otras ideas, proponen limitar el derecho de veto de esas cinco potencias o ampliar el número de integrantes del consejo.
Con respecto al conflicto de Siria, Temer dijo que “sigue siendo una fuente enorme de sufrimiento”, en la que “las mujeres y los niños son sus principales víctimas. Pedimos a las partes que respeten los acuerdos respaldados por el Consejo de Seguridad”, afirmó Temer, y pidió entre ellos que se permita el acceso de la asistencia humanitaria a la población civil.
También mencionó el reciente acuerdo en Colombia para terminar con el conflicto armado de las FARC, y felicitó por ello al presidente Juan Manuel Santos.