El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo que “estigmatizar” a los musulmanes le hacía el juego a los yihadistas, “que quieren que nos enfrentemos entre nosotros”, lo que supone una crítica implícita candidatos republicanos a la Casa Blanca. La lucha contra el grupo Estado Islámico (EI), “nuestros aliados más importantes son los musulmanes”, declaró en su alocución semanal, tras los atentados del martes en Bruselas, reivindicados por el EI, que provocaron 31 muertos y alrededor de 300 heridos.
Obama presentó sus condolencias por los dos estadounidenses muertos en esos atentados, durante los que al menos otros 14 resultaron heridos.
“Tenemos que rechazar cualquier intento de estigmatizar a los musulmanes estadounidenses” y elogiar “sus enormes contribuciones a nuestro país y a nuestro modo de vida”, afirmó Obama.
“Esos intentos son contrarios a nuestro carácter, a nuestros valores y a nuestra historia como nación, construida sobre la idea de libertad religiosa”, aseguró el presidente estadounidense.
“También son contraproducentes. Le hacen directamente el juego a los terroristas, que quieren que nos enfrentemos entre nosotros; que necesitan motivos para reclutar más personas para su odiosa causa”.
Los dos principales aspirantes a la candidatura republicana para las elecciones presidenciales de noviembre, Donald Trump y Ted Cruz, apoyan la idea de que la Policía patrulle los barrios musulmanes. Trump quiere además prohibir temporalmente el ingreso de musulmanes a Estados Unidos por temor a que un extremista se oculte entre ellos.
Obama reconoció que el EI “representa una amenaza para todo el mundo civilizado”, pero prometió que “los terroristas fracasarán”. Saludó la eliminación por Estados Unidos del número dos de la organización yihadista, Abdel Rahmane al-Qaduli, anunciada el viernes.