La Iglesia católica en Argentina se sumó, a través del mensaje del titular del Episcopado por el inicio de la Cuaresma, a los reclamos por una “independencia del poder Judicial” tras la muerte del fiscal Nisman, informaron medios locales.
El titular de la Conferencia Episcopal Argentina, José María Arancedo, reclamó “compromiso” en su mensaje e instó a trabajar “para construir el bien común de la patria”. “Resulta imprescindible asegurar la independencia del Poder Judicial respecto del poder político y la plena vigencia de la división de los poderes republicanos en el seno de la democracia”, resaltó Arancedo.
Las declaraciones del religioso llegaron después de la marcha realizada en la capital argentina y otros puntos del país como homenaje al fiscal Nisman, hallado muerto el pasado 18 de enero con un tiro en la cabeza en circunstancias que todavía no fueron esclarecidas. En esa manifestación participó la Comisión Nacional de Justicia y Paz, un organismo católico que depende de la Conferencia Episcopal Argentina y está conformado principalmente por laicos.
Nisman murió cuatro días después de haber denunciado a la presidenta argentina, Cristina Fernández, y a varios dirigentes oficialistas por presunto encubrimiento a los sospechosos iraníes del atentado a la mutual judía AMIA en 1994.