El presidente de Bancolombia, Carlos Raúl Yepes, defiende la polémica reforma tributaria propuesta por el gobierno para financiar una Colombia en paz, convencido de que una terminación del conflicto armado permitirá a la economía crecer de forma sostenible un 1,5 % más.
“Vale más la guerra que la paz”, advirtió Yepes al remarcar que la inversión en educación, equidad y empleo digno, así como en infraestructuras y agricultura, lo fundamental para crear un escenario de paz, “siempre será inferior a lo que cuesta el conflicto”.
Yepes, que lidera el mayor banco privado de Colombia y el octavo de Latinoamérica, es uno de los 120 grandes empresarios que se ha sumado a la campaña “Soy Capaz”, dirigida a promover la reconciliación en un país que acumula 50 años de guerra contra guerrillas, narcotraficantes y criminales.
Con 139 años de vida y presencia en Colombia, Costa Rica, Panamá, Guatemala, El Salvador, Nicaragua, Honduras, Perú, Puerto Rico e Islas Caimán, donde suman 40.000 empleados, Bancolombia obtuvo una utilidad neta de 1,53 billones de pesos (765 millones de dólares) en 2013, un 11 % más que en el año anterior.
Según cifras oficiales, desde el año 2000 Colombia ha gastado en Defensa 199,9 billones de pesos (alrededor de 99.950 millones de dólares), un presupuesto que ha crecido progresivamente hasta llegar en 2014 a 27,7 billones de pesos (13.850 millones de dólares).
El banquero consideró que la reforma tributaria propuesta por el Gobierno, que incluye una extensión del impuesto al patrimonio y del gravamen a los movimientos financieros, conocido como el “cuatro por mil”, si bien afectará a las empresas, engordará el número de contribuyentes y permitirá lograr los objetivos.
Con esa subida de impuestos, el Ejecutivo del presidente Juan Manuel Santos espera recaudar hasta 12,5 billones de pesos más (6.250 millones de dólares), sin contar una eventual subida del IVA, todavía no anunciada oficialmente, desde el 16% actual al 18%.
“Hablar de impuestos no es agradable pero sí necesario, yo apoyo la reforma tributaria porque Colombia tiene que generar cultura de pago de impuestos, hay mucha evasión, que todos pongan en la medida de sus posibilidades, que haya menos exenciones, se recaude bien y que el Estado sea eficiente y ataque la corrupción”, manifestó.
Según Yepes, “el crecimiento económico sería cuantitativo y cualitativo, la paz aportaría 1,5 puntos al Producto Interno Bruto (PIB) colombiano de forma sostenible”.
“En vez de gastar en balas, aviones y barcos de guerra, en soldados y tropas, se podrán utilizar los recursos en lo que tanta falta nos hace”, insistió.
Pero advirtió de que aunque se logre un acuerdo entre el Gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que negocian desde 2012 en Cuba, “Colombia necesitará entre 10 y 20 años para tener un Estado transformado y reconciliado”.
En ese sentido fue claro: “con FARC o sin FARC, con La Habana o sin La Habana, debemos tener una agenda para el conflicto y el postconflicto”, más allá de los resultados de ese diálogo.
Bancolombia se ha sumado a la campaña con el lema “Soy capaz de ponerle alma a mi país” bajo el convencimiento de que “la paz debe ser sostenible en el tiempo y el objetivo final es la transformación social”.
Para ello ha difundido un mensaje de reconciliación a sus 25.000 empleados y a sus diez millones de clientes en Colombia mediante eslóganes, celebración de eventos culturales y publicidad.
Con 139 años de vida y presencia en Colombia, Costa Rica, Panamá, Guatemala, El Salvador, Nicaragua, Honduras, Perú, Puerto Rico e Islas Caimán, donde suman 40.000 empleados, Bancolombia obtuvo una utilidad neta de 1,53 billones de pesos (765 millones de dólares) en 2013, un 11 % más que en el año anterior.