La Suprema Corte de Estados Unidos volvió a desestimar las apelaciones presentadas por tres tabacaleras contra once sentencias condenatorias de la Justicia de Florida. Deberán indemnizar con 70 millones de dólares a fumadores afectados por enfermedades vinculadas al tabaquismo.
El argumento de la Justicia es que las empresas engañaron durante años a los fumadores sobre los riesgos del tabaquismo. Mientras declaraban públicamente que “la nicotina no genera dependencia”, está probado que sabían desde los años 60 que es adictiva y que fumar provoca cáncer, entre otras enfermedades.
Para las tabacaleras es el segundo revés judicial de peso en los últimos meses. En abril la Corte de Apelaciones de Illinois condenó a Philip Morris International a indemnizar con 10.100 millones de dólares a 1,4 millones de fumadores.
Las condenadas en Florida son las tres tabacaleras más grandes de los EEUU, Philip Morris USA (Marlboro), Lorillard (Newport, Kent) y Reynolds Tobacco (Camel). La más afectada es esta última, con ocho sentencias en contra. Los beneficiarios recibirán compensaciones que en algunos casos superan los 25 millones de dólares.
Según la agencia Bloomberg, las tabacaleras tienen pendientes más de 4 mil demandas, por lo que se enfrentan a miles de millones de dólares en indemnizaciones por daños. Hasta ahora, según Reynolds, ya pagó compensaciones por 450 millones de dólares.
La historia comenzó en 1994, cuando se presentó una demanda colectiva en nombre de siete personas y en representación de unos 100 mil fumadores y familiares. El expediente pasó a la historia como el “caso Engle” por el nombre del pediatra que figuraba primero en la nómina de demandantes, Howard Engle.
La Justicia falló en contra de las tabacaleras en 2000 y estipuló una indemnización de 145 mil millones, pero tres años después el Tribunal de Apelaciones revocó la decisión. Argumentó que el monto era excesivo y que las condiciones médicas de los demandantes eran muy distintas entre sí como para encarar una acción de clase.
En 2006, el Tribunal Supremo de Florida confirmó la decisión de la corte de apelaciones, pero reconoció el derecho a realizar demandas individuales, lo que derivó en cientos de reclamos y decisiones a favor de los fumadores, como las diez que las tabacaleras intentaron apelar, pero que hoy fueron rechazadas. Es la octava vez que el Tribunal Supremo se niega a analizar un expediente de estas características.
En cambio, en octubre de 2013 la tabacalera Liggett anunció el pago de 110 millones de dólares para resolver los juicios en su contra en Florida.