El aumento de la violencia en Campinas, la segunda mayor área metropolitana del estado brasileño de Sao Paulo, ha obligado a la policía, tras una sentencia judicial, a escoltar a los carteros de la ciudad, que denuncian ser constantemente asaltados.
La zona metropolitana de Campinas, con 39 municipios y 3,5 millones de habitantes y que durante el Mundial acogerá a la selección nigeriana de fútbol y probablemente al Portugal del balón de Oro Cristiano Ronaldo, vive una oleada de crímenes que la han colocado en las portadas de los diarios nacionales.
Pese a que los homicidios son un suceso relativamente común en el estado más rico y poblado del país -en 2013 se registraron 4.439 asesinatos- Campinas ha acaparado estos días el protagonismo tras la muerte de doce personas en una misma noche, la del pasado 12 de enero, y cinco policías están siendo investigados.
La matanza, según los medios locales, fue atribuida a los llamados “grupos de exterminio”, integrados por agentes de los organismos de seguridad y que supuestamente se vengaron por la muerte de un policía durante un asalto a una estación de gasolina.
Pero más allá de los delitos de sangre, los carteros del municipio, tras sufrir constantes asaltos y secuestros “exprés”, se vieron forzados a pedir ayuda a las fuerzas de seguridad, que, tras una orden judicial, acompañan a los trabajadores de Correos, según explicó la empresa pública.
Así, la estatal Correos reveló que en las áreas más peligrosas del municipio, “las entregas están siendo hechas con escolta” y “en algunas partes de esas áreas se está adoptando un modelo de entrega diferenciada” de la correspondencia.
Dicho modelo consiste en entregar un aviso de llegada a los destinatarios en el que se le comunica el lugar donde debe ir a recoger sus cartas. La empresa de correspondencia justifica que estas medidas son para “preservar la integridad de los empleados, de los clientes y de los objetos postales”.
Con dicho objetivo, Correos ya firmó con la Policía Federal (PF) brasileña un convenio de cooperación “para la implantación de acciones integradas para la prevención y represión de robos a carteros y asaltos a agencias en todo Brasil”.
Dicho acuerdo, asegura la empresa, permitirá ampliar las acciones que ya fueron adoptadas en la región metropolitana y que “resultaron en una reducción del 36% de robos”.