El jefe de Estado venezolano, Nicolás Maduro, aseguró que las prioridades no son las elecciones sino la recuperación de la economía de Venezuela declarada en emergencia tras experimentar el peor desempeño de su historia.
La Cancillería de Venezuela “rechazó las amenazas y agresiones” que, según el organismo, han expresado los presidentes de Argentina y Brasil en contra de la nación caribeña “en su acción para implosionar y destruir” el Mercosur.
Los presidentes de Argentina y Brasil, los dos mayores socios del Mercosur, recordaron este lunes que dieron un ultimátum a Venezuela para que “cumpla los requisitos” que le permita integrarse plenamente al bloque regional.
La industria petrolera de Venezuela, cuyos enormes ingresos alimentaron la gran mayoría de los planes gubernamentales, ahora se encuentra en un espiral de caos. Para colmo de males el gobierno venezolano ha tenido que recurrir a Estados Unidos, su némesis, en busca de ayuda.
El canciller de Venezuela, Delcy Rodríguez, se quejó de la “intolerancia política e ideológica” de la “triple alianza” del Mercosur, en referencia a Paraguay, Argentina y Brasil, a la vez que se anunció la voluntad de Caracas de dialogar con los socios del bloque regional.
El Movimiento de Países No Alineados (NOAL) cerró este domingo su cumbre en Isla de Margarita con un espaldarazo al presidente Nicolás Maduro ante la severa crisis en Venezuela y críticas a la “injerencia” de Estados Unidos en varios conflictos.
El vicecanciller de Uruguay Jose Luis Cancela dijo que la abstención de su país en la declaración emitida por los miembros fundadores del Mercosur, que acordaron que Venezuela no ejercerá la presidencia del mismo, tiene como fin “salvar” el bloque.
La cancillería de Brasil emitió un comunicado fechado el 13 de setiembre, invocando a los cuatro países fundadores de Mercosur, en el cual se refiere al funcionamiento del bloque, el protocolo de adhesión de Venezuela y afirma que si al primero de diciembre próximo dicho país no cumple con los compromisos asumidos, será suspendido.
El canciller brasileño, José Serra, dijo que confía en que los roces diplomáticos con Ecuador y Bolivia, derivados de la destitución de la ahora ex presidenta Dilma Rousseff, serán superados, aunque puso en duda que eso ocurra con Venezuela.
El vicepresidente de Estados Unidos, Joseph Biden, tendió la mano al nuevo presidente brasileño, Michel Temer, y exigió al Gobierno venezolano no “ignorar” las demandas de su pueblo, además de opinar que los muros no solucionarán los problemas del continente, en referencia al magnate Donald Trump.