La campaña del presidente Donald Trump rechazó el jueves los pedidos para modificar las reglas de los próximos dos debates entre él y su rival demócrata Joe Biden, después de un primer enfrentamiento empañado por constantes interrupciones y arrebatos.
Los gritos, las interrupciones y los momentos de caos del primer debate presidencial sacudían el miércoles a Estados Unidos: el presidente y el candidato a la reelección, Donald Trump, lo calificó de “divertido”, su rival demócrata, Joe Biden, lo acusó de ser “una vergüenza nacional” y la comisión reguladora prometió que el próximo encuentro será “más ordenado”.
Las encuestas de opinión se suceden y amplían la ventaja que el encarcelado expresidente Lula da Silva obtendría si pudiera disputar las elecciones del 7 de octubre próximo en Brasil. Un sondeo publicado este miércoles le da aun 39% frente al 30% que sumó en junio.