MercoPress, in English

Jueves, 28 de marzo de 2024 - 22:28 UTC

 

 

Lluvias ayudan a combatir el fuego en Portugal; bandera de Europa a media asta por los 45 muertos

Miércoles, 18 de octubre de 2017 - 08:13 UTC
Casi 3.000 bomberos seguían movilizados para evitar que se reaviven algunos focos ígneos, pero la Protección Civil no señaló ningún siniestro activo “importante” Casi 3.000 bomberos seguían movilizados para evitar que se reaviven algunos focos ígneos, pero la Protección Civil no señaló ningún siniestro activo “importante”
El mayor problema que enfrentan los bomberos, es la “fatiga física” de sus hombres, así como lo amplio del perímetro que intentan estabilizar. El mayor problema que enfrentan los bomberos, es la “fatiga física” de sus hombres, así como lo amplio del perímetro que intentan estabilizar.
Portugal observa tres días de duelo nacional, en tanto en Bruselas, todas las banderas de la Comisión Europea fueron izadas a media asta Portugal observa tres días de duelo nacional, en tanto en Bruselas, todas las banderas de la Comisión Europea fueron izadas a media asta

La llegada de la lluvia y vientos menos violentos favorecían este martes el trabajo de los bomberos para controlar los devastadores incendios forestales que dejaron al menos 45 muertos en Portugal y en España. El fuego causó 41 muertos en el centro y norte de Portugal, duramente golpeado por los incendios por segunda vez en cuatro meses.

 Pero seis de las siete personas dadas por desaparecidas la víspera fueron halladas sanas y salvas, anunció una portavoz de la Protección Civil, que censó también 71 heridos, de los cuales 16 en estado grave.

Casi 3.000 bomberos seguían movilizados para evitar que se reaviven algunos focos ígneos, pero la Protección Civil no señaló ningún siniestro activo “importante” desde el amanecer. Los bomberos se vieron ayudados por la lluvia que cayó durante la noche.

Del otro lado de la frontera, el balance este martes era de cuatro muertos en Galicia, región vecina ubicada en el noreste de España, también muy afectada por los incendios forestales desatados el domingo, atizados por los vientos cálidos originados por el paso de la tormenta tropical Ophelia ante las costas de la península Ibérica.

En los bosques de Arganil, situados cerca de Coimbra, los bomberos continuaban lanzando agua en los flancos de una colina cubierta de cenizas negras, de donde se elevaban columnas de humo blanco.

Un comandante de una corporación de bomberos llegada desde Corucche (200 km al sur), explicaba a la televisión pública RTP: “Cayó mucha lluvia en la noche, pero no lo suficiente para extinguir por completo el fuego”.

El mayor problema que enfrentan, añadió, es la “fatiga física” de sus hombres, así como lo amplio del perímetro que intentan estabilizar.

Aún así, la lluvia caída durante la noche prácticamente puso fin a esta ola de incendios mortales, la segunda en cuatro meses. A mediados de junio, Portugal sufrió el incendio forestal más trágico de su historia, con un balance de 64 muertos y 250 heridos, cerca de Pedrogao Grande (centro).

A partir de este martes, Portugal observa tres días de duelo nacional, en tanto en Bruselas, todas las banderas de la Comisión Europea fueron izadas a media asta en homenaje a los muertos en los incendios en la península Ibérica.