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Electorado suizo vota limitar ingreso de inmigrantes, a pesar de la UE y pedido de partidos

Lunes, 10 de febrero de 2014 - 07:08 UTC
“Es un giro en nuestra política de inmigración”, se felicitó, en cambio, el presidente de la UDC, Toni Brunner “Es un giro en nuestra política de inmigración”, se felicitó, en cambio, el presidente de la UDC, Toni Brunner

La ley que limita la entrada de inmigrantes en Suiza, impulsada por el partido de derecha populista UDC, logró este domingo la doble mayoría requerida, la de los electores (50,3%), y la de los cantones, por lo que entraría en vigencia próximamente en el país.

 La ministra suiza de Justicia, Simonetta Sommaruga, anunció poco después de conocerse el resultado que el gobierno aplicará “rápido y de forma consecuente” el texto del referendo, e invitó al diálogo a todos los partidos.

No obstante, la mayoría de los partidos políticos suizos y la patronal habían llamado a los electores a votar en contra de la propuesta “Fin a la inmigración masiva”, cuyas restricciones alcanzan también a los países miembros de la Unión Europea.

Según consideran los opositores de la iniciativa, el “sí” amenaza seriamente el acuerdo de libre circulación de personas con la Unión Europea, vigente desde 2002, que se ha traducido en una fuerte inmigración de ciudadanos del bloque a Suiza. Una fuente europea agregó que también se vería en tela de juicio la pertenencia de Suiza al espacio Schengen de fronteras abiertas.

Tras darse a conocer los resultados del referendo realizado este domingo, la Comisión Europea “lamentó” la noticia e informó que “examinará las implicaciones de esta iniciativa sobre el conjunto de las relaciones entre la Unión Europea y Suiza”, de acuerdo con un comunicado.

La patronal suiza estimó que ahora se abre “un período de incertidumbre para la economía suiza, lo cual no es bueno”. De igual manera se expresó el sindicalista y diputado socialista Paul Rechsteiner, quien dijo que “es un mal resultado, porque Suiza necesita tener buenas relaciones con la UE”.

“Es un giro en nuestra política de inmigración”, se felicitó, en cambio, el presidente de la UDC, Toni Brunner. Los partidarios de limitar la inmigración en Suiza estiman que ésta es una cuestión de soberanía nacional y que el país no debe plegarse a los dictados europeos.

La UDC culpa, además, a la inmigración europea de causar los numerosos males que sufre Suiza, como la saturación de los transportes públicos, la falta de vivienda y la destrucción del paisaje a causa de la construcción.

Suiza, un país neutral de 8 millones de habitantes que no forma parte de la UE pero está rodeado de Estados del bloque, deberá en teoría reinstaurar el sistema de cuotas anuales de inmigrantes, que existía antes del acuerdo de libre circulación.

En 2013, los extranjeros representaban el 23,5% (1,88 millones de personas) de la población en Suiza. De estos, 1,25 millones son ciudadanos de la UE o de la Asociación Europea de Libre Comercio. Se estima que, por año, llegan 80.000 inmigrantes al país. Italianos y alemanes son los más numerosos, con 291.000 y 284.200 ciudadanos, respectivamente, seguidos de portugueses (237.000) y franceses (104.000).-

Categorías: Política, Internacional.